Falsificaciones y engaños: las estrategias de coyoteros que generan la migración riesgosa en niños
La detención de Dylan, de 4 años, de Cuenca, en la frontera de Estados Unidos (EE.UU.) con México, el último martes, revela que continúa la peligrosa migración ilegal de niños y adolescentes desde Ecuador.
Datos oficiales lo confirman: según el Ministerio de Relaciones Exteriores y Movilidad Humana, en 2022 12.900 ecuatorianos han sido detenidos en esta línea fronteriza, de ellos unos 3.000 eran menores de edad.
Información de Customs and Border Protection (CBP), de EE.UU., dan cuenta que entre enero y julio de este año 576 niños solos fueron encontrados en la frontera de ese país. En 2021 en cambio fueron 3.298.
Está cifra es la más alta que se ha presentado hasta ahora, de acuerdo con los registros de CBP, que es la institución encargada de la protección aduanera y fronteriza de EE.UU.
En el caso de Dylan, este fue encontrado con su pasaporte y una hoja con información de sus padres, que se conoce, viven en New Jersey, en EE.UU.
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Falsificaciones
Carlos Palacios es abogado y representante legal de una de las familias, que en 2018, lograron que Manuel B., un conocido coyotero en Cuenca, sea sentenciado a 22 años de cárcel.
Palacios también ha trabajado en otros casos similares contra “coyoteros” y opina que detrás de la salida de niños y adolescentes a EE.UU., hay una red de falsificación de documentos.
“Los documentos que más se falsifican son las autorizaciones de salida de país, que dan los padres, y asimismo los poderes que se dan porque se trata de menores de edad…”, manifestó.
Para Palacios incluso es necesario investigar al interior de las notarías, pues sospecha que incluso en estas dependencias hay complicidad para facilitar el trámite de estos escritos.
“Hemos sabido que inclusive los mismos coyoteros se encargan de hacer todos estos trámites, les ofrecen todas las facilidades a los padres para llevarse a los pequeños…”, manifestó.
Deportaciones
Para Giovanni Sandoval, vicepresidente del colectivo Somos Ecuador, que da asesoría tributaria a ecuatorianos en EE.UU., los “coyotes pintan una realidad que es una completa mentira…”.
Señaló que los niños corren alto riesgo en su paso por la frontera porque generalmente no caminan por el desierto sino que son camuflados en compartimentos de vehículos para pasar por los controles.
“Una de las estrategias que usan los coyoteros es dejar a los niños cerca de donde están las patrullas de frontera, para que sean detenidos y luego les den la oportunidad de quedarse aquí en este país…”, mencionó.
Pero no siempre ocurre así, pues Sandoval conoce de niños ecuatorianos que han sido deportados al Ecuador porque sus representantes adultos no justificaron sus argumentos para pedir asilo.
Muerte
En junio de 2021 Christian Barbecho, de 15 años, de Cuenca, falleció deshidratado cuando intentaba ingresar a Estados Unidos (EE.UU.) por el desierto por la frontera con México.
Era oriundo de la comunidad de El Salado, perteneciente a la parroquia Sinincay. Viajaba con su padre. Ocurrió en Texas, uno de los estados por donde más entran los migrantes.
No se conocieron mayores detalles sobre este hecho dado que la familia del menor pidió privacidad con la información. El cuerpo fue repatriado al Ecuador. (CSM)-(I)
Niños heridos y muertos
Zoila Burhuan, de 23 años, y sus sobrinos Dayana Criollo, de 14 años, y Erick Burhuan, de 7, todos migrantes de Ecuador, oriundos de Cumbe, de Cuenca, todavía permanecen hospitalizados en México.
Ellos junto a unos 10 ecuatorianos más iban en una camioneta por la carretera El Seco – Azumbilla, en México, hasta la frontera de Estados Unidos (EE.UU.,) la noche del último 12 de agosto.
En Puebla, Veracruz, el vehículo volcó y dejó 11 heridos y seis muertos. Entre los fallecidos están las ecuatorianas: María Cocha, de 24 años; Darla Manzano, de 1 año 8 meses; y Margoth Negrete, de 22.
María Burhuan, madre de Zoila, y abuela de Dayana y Erick, contó que este último ha mostrado algo de recuperación en el hospital mientras que Dayana sigue en estado inconsciente.
Relató que los niños tenían previsto reencontrarse con su madre, quien reside desde hace unos tres años en EE.UU. Viajó porque aquí no conseguía trabajo.
Los coyotes engañan a los padres de los niños
Andrea Ledesma es extitular de la Subsecretaría Regional de la Secretaría Nacional del Migrante (SENAMI) y representante de la organización 1800 MIGRANTE.
Fuente: elmercurio.com.ec