Camerún: protestas en Duala tras la reelección de Paul Biya para un octavo mandato en Camerún
La ciudad portuaria de Duala vive su segundo día consecutivo de protestas y enfrentamientos después de que el Consejo Constitucional de Camerún anunciara la reelección del presidente Paul Biya, de 92 años, para un octavo mandato consecutivo. Biya, en el poder desde 1982, fue declarado ganador con alrededor del 53,7 % de los votos, frente al 35 % obtenido por el candidato opositor Issa Tchiroma Bakary, quien ha rechazado los resultados y denunciado fraude electoral.
Desde la tarde del lunes, varios distritos de Duala permanecen bajo fuerte presencia militar tras registrarse barricadas, incendios de neumáticos, saqueos y enfrentamientos entre manifestantes y fuerzas de seguridad.Testigos aseguran que las fuerzas armadas emplearon munición real para dispersar a la multitud, provocando el cierre de comercios y la paralización del transporte público.
“Me quedé destrozado cuando escuché la noticia de los resultados, simplemente me destrozó”, relató Max Ndongmo, residente de Duala. “Lo que están haciendo y han estado haciendo es pura hipocresía. A este Gobierno quiero decirle: tienen que parar”.Según fuentes locales, la tensión se mantiene en al menos cuatro distritos de la ciudad, donde persisten los bloqueos y la vigilancia militar.
}El principal opositor, Issa Tchiroma Bakary, rechazó de inmediato el resultado oficial, calificando las elecciones como una “mascarada política”.“No hubo elección; fue una simulación. Nosotros ganamos claramente”, declaró Tchiroma en una conferencia de prensa en Yaundé.El candidato ha pedido la anulación del proceso y llamó a sus seguidores a mantener las movilizaciones “pacíficas” hasta que se reconozca, según sus palabras, “la verdadera voluntad del pueblo camerunés”.
Por su parte, el gobierno defendió la legitimidad del proceso electoral y denunció “intentos insurreccionales” promovidos por sectores de la oposición. Un portavoz del Ministerio del Interior aseguró que las fuerzas del orden “actúan con profesionalismo” para preservar la estabilidad y proteger la propiedad pública y privada. El Consejo Constitucional, máxima autoridad electoral del país, declaró a Biya vencedor y llamó a “la unidad y la calma” tras la proclamación oficial.
El descontento popular refleja un malestar acumulado tras más de cuatro décadas de gobierno ininterrumpido. Analistas destacan que una población mayoritariamente joven, golpeada por el desempleo y la falta de perspectivas, exige renovación política.“El problema ya no es solo quién gana, sino la sensación de que nada cambia”, explica un observador local citado por Africanews. A las tensiones sociales se suma la crisis en las regiones anglófonas del país, donde persisten conflictos separatistas y denuncias de abusos de derechos humanos.
Organizaciones internacionales como Human Rights Watch han advertido sobre el riesgo de una escalada de violencia si el Gobierno responde con represión prolongada. Mientras tanto, los comercios de Duala permanecen cerrados y el ambiente sigue siendo de tensión y miedo. Aunque Biya ha apelado al “orden y la serenidad”, muchos cameruneses consideran que el país se encuentra en un punto de inflexión. “Después de tantos años, lo que pedimos no es violencia, sino cambio”, resume Ndongmo.
Fuente: pressenza.com
