¿Cómo están cubriendo los medios y periodistas independientes el caso de “Los 4 de Guayaquil”?
Mucho se ha escrito, se ha publicado y se ha opinado sobre el caso “Los 4 de Guayaquil”, y lo positivo, por no decir lo único, es que mantiene fresco el evento y ejerce presión sobre las autoridades; sin embargo, el tratamiento de la “noticia” por parte de los periodistas, sobre todo de los medios tradicionales, no ha sido el más acertado.
Reproducir una y otra vez un comunicado oficial -sea desde el gobierno o desde alguna ONG- no ayuda a esclarecer los hechos. Otros, los que tienen más recursos, pueden enviar a un par de periodistas al lugar de los hechos a entrevistar a vecinos y familiares, pero por el apuro mediático de vender una nota caen en el amarillismo y el sensacionalismo.
Ya sabemos que los niños querían ser futbolistas, que salieron un domingo a divertirse en grupo, que tenían entre 11 y 15 años, que eran de un estrato social bajo, que no tenían tatuajes ni pertenecían a alguna pandilla y que su único error -condenados y acribillados mediáticamente por la moral superior de los que se guardan las noches- fue salir pasadas las 21.00 de aquel día.
Pero, ¿Qué sabemos de los militares? ¿Dónde está el niño que pudo escapar, como se ve en un vídeo publicado en redes, cuando atrapan a su compañero y este se aleja campante? ¿Quién estaba a cargo de ese operativo? ¿Quién era el jefe del operativo? ¿Por qué se “los abandonó” en medio de la nada en lugar de llevarlos al mismo sitio de donde los secuestraron? ¿Ocultan algo los militares? ¿Quién llamó al padre? ¿Los niños fueron obligados a decir “nos dejaron botando” para encubrir a los militares? ¿Son falsos positivos de una lucha inventada por el presidente de la república? ¿Qué jueces están llevando el caso? ¿Cuáles son los antecedentes de estos jueces? ¿Qué GDOs ocupan esa zona? Un sinfín de preguntas que aún no han sido elaboradas y mucho menos atendidas.
Fuente: lalineadefuego.info