En el centenario de Fals Borda: Tres conceptos para homenajear a uno de los más destacados académicos colombianos

Reseña del libro Utopía, epistemología y política: a cien años del nacimiento de Orlando Fals Borda, una de las publicaciones que celebran los cien años del nacimiento del científico social colombiano.
El número 258, septiembre de 2025, de la edición colombiana de Le Monde Diplomatique recoge una nota sobre el libro Utopía, epistemología y política: a cien años del nacimiento de Orlando Fals Borda cuya edición ha corrido a cargo de Helwar H. Figueroa S. y Damián Pachón Soto y que ha sido publicado por ediciones desde abajo con el respaldo de la Cooperativa Financiera Confiar y la Casa Nacional del Profesor (Canapro). El texto está compuesto por nueve capítulos que giran alrededor de esos tres tópicos presentes a lo largo de la obra de Fals Borda -utopía, epistemología y política- y que se relacionan en él de manera integradora.
Fals Borda nació en Barranquilla el 11 de julio de 1925 y falleció en Bogotá el 12 de agosto de 2008. A lo largo de sus ochenta y tres años de vida, el considerado como padre de la sociología en Colombia, produjo un ingente trabajo sociológico y antropológico, e incluso fotográfico, y contribuyó a crear la primera facultad de Sociología, en la Universidad Nacional de Colombia en Bogotá, consolidando las ciencias sociales en el país.
Utopía, epistemología y política: a cien años del nacimiento de Orlando Fals Borda es un sentido y sincero homenaje a una de las figuras más relevantes del campo científico social colombiano del siglo XX e inicios del XXI que trabajó y luchó por romper con el pensamiento colonial dominante y con el corsé impuesto desde afuera que impedía ver la realidad colombiana y latinoamericana con una mirada autóctona, lo que condicionaba la propia identidad.
Con sus investigaciones, Fals Borda facilitaba abordar el conocimiento situado entrando a dialogar con las comunidades y proponiendo tomar conciencia del mundo para interpretarlo desde nuestro lugar en él y así transformarlo. Un pensador que se preguntaba si “¿el conocimiento es para la explotación o para la justicia social?” y que afirmaba que “la universidad quedó anquilosada, atrasada y rutinaria […] la revolución intelectual que necesitamos tiene que golpear a la universidad para sacarla de esa situación. La universidad debe devolver más a la sociedad, al pueblo”.
Fals Borda fue un intelectual sentipensante, un sociólogo crítico, un investigador empírico y un ciudadano comprometido que ejerció y dotó de sentido esos cuatro adjetivos al practicarlos con responsabilidad y alejándolos de contenidos vacuos. Fue crítico desde el conocimiento, empírico desde la práctica y comprometido desde la política; en suma, un ser que aunaba sentimiento y pensamiento.
Su quehacer académico e investigativo alcanzó dos cotas que, a mi entender, destacan por encima de las demás por novedosas y relevantes: su propuesta de investigación y acción y participativa (IAP), orientada a la transformación social y en la que se contaba con la participación activa de la población implicada, y su colaboración con Germán Guzmán y Eduardo Umaña en la elaboración del libro La violencia en Colombia. Estudio de un proceso social (1962), un hito en la indagación sobre los conflictos violentos que asolaban el país y que buscaba plantear explicaciones que permitieran “al exégeta tejer con exactitud la imagen desgarrada pero aleccionante de este trayecto de la historia de Colombia”. Tal vez hoy, la realidad social ameritaría un nuevo estudio que abarcara la violencia de los siguientes sesenta años.
La pertinencia y actualidad del pensamiento y las acciones investigativas de Fals Borda quedan reflejadas en las palabras de Damián Pachón quien, en la contraportada del libro, afirma que su “legado epistémico, utopista y político no pertenece al pasado. Hoy la deriva autoritaria y antidemocrática del Norte; la debacle ecológica y el posible colapso civilizatorio; la desposesión de futuro que atraviesa a la actual sociedad global y la desesperanza reinantes, ponen de presente la vigencia y la urgencia de sus planteamientos para pensar el mundo por venir, el que se asoma en medio de la actual transición geopolítica del mundo con sus múltiples retos, problemas y posibilidades”.
Fuente: pressenza.com