enero 2, 2025
Portada » Blog » Revuelta en la redacción de la BBC debido a la guerra contra Gaza

Revuelta en la redacción de la BBC debido a la guerra contra Gaza

Los principales medios de comunicación rara vez se permiten auténticas mentiras mediáticas, pero ocurre. Basta pensar en la fosa común de Timișoara, en los bebés en la incubadoras de Kuwait o en las armas de destrucción masiva de Irak (para más explicaciones sobre esas flagrantes mentiras, véase el anexo al final del artículo).

La distorsión de la realidad se suele producir de forma más sutil, a través de evitar, omiitir o subestimar ciertos hechos, eliminar el contexto, seleccionar a los expertos, magnificar ciertos acontecimientos, titulares engañosos, imágenes sugestivas, etcétera.

Esta distorsión de la realidad no es obra de periodistas individuales en la mayoría de los casos, sino que es iniciada e impulsada por sus redactores jefe que, a su vez, están sometidos a la presión de los magnates de los medios comerciales. En el caso de las cadenas públicas, están bajo tutela y control político.

Otro filtro que colorea la cobertura procede de los anunciantes. En la medida de lo posible se prohíben los mensajes que no llevan a sus expectativas de beneficios.

Hay tres mecanismos para tener a raya a los periodistas. En primer lugar, se comprueba si su ideología coincide más o menos con la del redactor jefe y la del empresario. No es obvio hacerlo cuando se les contrata, pero con el tiempo es posible y determina su futuro profesional.

En segundo lugar, los periodistas se amoldan a la presión editorial aplicando la autocensura para poder seguir viviendo y no poner en peligro sus carreras.

Si esos dos mecanismos no bastan, los redactores jefe ajustan cualquier elemento «molesto» al revisar o simplemente suprimen determinados pasajes. En el peor de los casos, no se publican artículos o informes enteros.

Fuente: rebelion.org